Si no tienes esta costumbre…adquierela, y si la adquieres, respétala y como ama de casa dale su valor y haz que tu familia perciba lo mucho que vale.
Como en cualquier mesa hay ciertas reglas de respeto. No llegues tarde a la mesa familiar. No creas que POR TRATARSE de la casa de mama o de un hermano pasa inadvertido. Puede producir roces innecesarios porque esta conducta no está calculada para promover armonía ni buenos sentimientos…NI en casa…
Hay que enseñar a los más chicos a ir a la mesa cuando le avisan…no 10 minutos después…
Créeme…VALE la pena empezar con esta maravillosa costumbre…comer en familia.