Una peca es una lesión benigna formada por las células que sintetizan el pigmento de la piel o melanócitos . Se manifiesta habitualmente como una mancha de color marrón o negro de medida pequeña (de medio a un centímetro) en la piel.
Se debe diferenciar entre las pecas que están presentes al nacimiento y que se denominan pecas o nevus congénitos y las más comunes, que son las que aparecen durante la infancia adolescencia o edad adulta.
Se desconocen con certeza los factores implicados en la aparición de las pecas adquiridas y se considera que el número y el tipo de pecas viene determinado genéticamente. La exposición solar es otro factor que puede influenciar en el número de pecas de cada individuo.
Ua peca puede volverse maligna, pero es un fenómeno poco frecuente. El tumor maligno que deriva de los melanócitos (melanoma maligno) es un tumor que puede aparecer tanto a partir de piel normal, o bien a partir de una peca que ha cambiado. Resulta importante detectarlo precozmente, puesto que un diagnóstico y tratamiento precoz implica un aumento importantísimo de las posibilidades de curación.
¿Es normal que las pecas experimenten cambios a lo largo de los años?
No hay zonas peligrosas por las pecas.
Es necesario evitar las quemaduras solares y exposiciones al sol intensas. Es aconsejable que las personas que tienen muchas pecas pidan visitas periódicas al médico.
La autoexploración ha demostrado ser una herramienta eficaz en el diagnóstico precoz del melanoma maligno. Hay que fijarnos en aquellas pecas que mantienen mucha actividad o cantidad de pigmento (oscuridades), aquellas de aspecto irregular, las que no estamos seguros de cuando han aparecido o las que han experimentado un cambio reciente.
Es recomendable que cualquier cambio anormal de una peca incluso sangrado, inflamación, prurito o cambio de medida sea motivo de consulta al médico.