A sus 84 años murió Carla Fracci, la reina de la danza italiana. Primera bailarina de la Scala de Milan y una de las más reconocidas y apreciadas en todos los más importantes teatros alrededor del mundo.
Falleció víctima de un tumor.
Nacida en Milán en 1936, Carla Fracci construyó la parte central de su carrera estudiando en la escuela de danza La Scala, de la que más tarde se convirtió en una étoile.
Fracci siempre estuvo ligada al teatro. En 1955 debutó en el escenario del Piermarini que había sido un trampolín para los teatros más famosos del mundo.
Hija de un conductor de tranvía, comenzó a bailar a los 10 años en la escuela Scala y tiene a Vera Volkova entre sus maestras, graduándose en 1954 y convirtiéndose, tras algunos escenarios internacionales, en primera bailarina tres años después.
Hasta la década de 1970 había bailado con diversas compañías extranjeras, desde el London Festival Ballet al Royal Ballet, el Stuttgart Ballet al Royal Swedish Ballet, siendo artista invitada en el American Ballet Theatre.
Desde la década de 1980 dirigió el cuerpo de ballet de San Carlo, luego de la Arena de Verona, y finalmente de la Ópera de Roma, donde permaneció hasta 2010.
Fiel también a su amada actividad didáctica, prestando atención a los jóvenes talentos. Su notoriedad artística estuvo ligada principalmente a las interpretaciones de papeles románticos como Julieta,Swanilda, Francesca da Rimini y sobre todo Giselle.
La funeraria de Carla Fracci se instalará en el vestíbulo del teatro milanés, mañana de 12 a 18, con última entrada a las 17:30. «Haremos una funeraria en La Scala, algo que se ha hecho muy pocas veces», anunció el superintendente Dominique Meyer. Cosa rara «pero siendo Carla Fracci …», añadió destacando que «fue la bailarina más importante del teatro del siglo pasado pero también una estrella muy importante de la danza internacional».
Fuente: ansa.it