Francisco Rivera Ordóñez, quien este lunes, 10 de agosto, sufrió una cogida muy grave en la plaza de toros de Huesca, ha pasado la noche en la UCI del hospital San Jorge de Huesca «tranquilo pero con muchos dolores». Según ha podido saber HOLA.com se enuentra estable dentro de la gravedad y, tras realizarle más pruebas, han decidido trasladarle a lo largo de este martes al Hospital Quirón de Zaragoza.
El torero, resultó herido,el toro le propinó una extensa cornada en el bajo vientre, tuvo que ser operado de urgencia en la enfermería de la plaza. El diestro salió del quirófano pasadas las diez de la noche tras dos horas y media de operación. En declaraciones al portal taurino Aplausos, el doctor Crespo, que ha intervenido al torero, mostró su preocupación por la gravedad de la cogida. «Es una herida terrible por lo que le ha hecho y lo que aún le puede hacer. Tengo un disgusto horrible porque todos nos hemos dado cuenta cuando le hemos abierto la barriga de que el toro le ha podido matar en el ruedo».
«La cornada es gravísima, pero dentro de eso la suerte es que está vivo», dijo. El mayor temor del cirujano es que se infecte la herida o que se puedan formar trombos. Durante la noche se le han realizado diversas pruebas y dependiendo del resultado se decidirá o no operarle de nuevo. «El torero se ha marchado a la UVI estable, e incluso se ha despertado y ha hablado con su mujer, pero soy cauto y en este caso más que nunca», aseguró el doctor Crespo al citado portal.
Francisco fue cogido en el saludo de capote a ese cuarto toro de corrida, de nombre «Traidor» de la ganadería de Albarreal.
