La celebración
Hanukkah, también llamada la “fiesta de las luces”, es celebrada por el pueblo judío durante ocho días seguidos. En esta fiesta, familias y amigos se reúnen a compartir tradiciones, juegos, cantos, platos típicos y a encender cada noche una nueva vela en el candelabro de nueve brazos.
Historia
Durante el siglo II a.C, Israel estaba ocupada por los helenos. Cuando se coronó como rey de Siria a Antíoque IV Epífanes, éste decidió helenizar al pueblo de Israel, prohibiéndole a los judíos seguir con sus tradiciones y costumbres; y obligándoles a adorar a los dioses griegos. Un grupo de judíos conocido como los macabeos, se rebelaron contra los soldados griegos, negándose a realizar actos que fueran en contra de su religión. Fue una guerra “de pocos contra muchos”. Finalmente el pueblo judío triunfó sobre los Sirios-Griegos y recuperaron el Templo Sagrado de Jersualén.
Cuando los macabeos recuperaron el Templo, lo encontraron profanado, con la Menorah (candelabro de siete brazos) apagada, y el aceite ritualmente puro suficiente para endenderla durante un solo día. Tardaron ocho días en conseguir más aceite. Pero un milagro ocurrió: En vez de durar un día, la Menorah quedó encendida durante ocho días seguidos. Este es el origen de la celebración llamada Hanukkah, también conocida como Jánuca, que en hebreo significa inauguración en referencia a la reinauguración del Templo de Jerusalén por los judíos. La palabra Hanukkah también significa dedicación.