Es importantísimo aprender a dar las gracias por todo. Se hace común el que muchos no tengan la delicadeza de saber agradecer cualquier favor o buena intención que otras personas tengan para ellos.
Dejar de manisfestar un gracias viene a representar que no sentimos agradecimiento alguno por que otros nos beneficien, revela no solo mala educación, deja ver falta de generosidad y grandeza humana. Busquemos a nuestro alrededor a quien ha hecho recientemente algo por nosotros, mucho más si es algo que ha sido importante.
Y busquemos una forma creativa de mostrarle nuestro agradecimiento. Hagámoslo por ellos, pero también por nosotros. Porque agradecer es a menudo tan gratificante como recibir.
Por: Norah Frías-Muñoz