En esta ocasión les traemos algunos consejos para cuidar los tan maravillosos libros:
Páginas
Siempre tratar con delicadeza las hojas, sobre todo al cambiar de páina.
Polvo
Los libros suelen acumular gran cantidad de polvo, para quitarles ese polvo basta con un plumero o paño y tener el libro bien apretado para que el polvo que estamos sacudiendo no entre a sus páginas. No olvidemos limpiar los estantes.
Estantes
Aleja los estantes para libros de de estufas, calefactores o cualquier fuente de calor, pues un clima myt seco perjudica la condición de los libros.
Estantes planos. El estante donde ubiquemos los libros siempre tiene que estar plano, horizontal, no es conveniente que estén inclinados, ya que los libros tienden a deformarse.
Humedad
Hojas con humedad. Si hay humedad, lo mejor es colocar un poco de talco entre las hojas, cerrar el libro y apretarlo con algún peso o una prensa durante varios días. Pasado este tiempo, retirar el peso y sacudir con un cepillo suave las páginas para retirar el talco.
Páginas pegadas
Si algún libro tiene las paginas pegadas, no debemos pensar que es irrecuperable. Colocamos las páginas sobre el vapor de agua y con mucha paciencia las separamos. Si es necesario, repetiremos la operación varias veces.
Flores
Es muy común que nos guste guardar flores dentro de las páginas de los libros, pero éstas suelen manchar con sus jugos las hojas.
Importante: Si necesitamos colocar insecticida nunca debemos hacerlo sobre los libros, ya que pueden afectar irremediablemente a los mismos.