Aprende y aplica estos sencillos pasos que debes seguir para aprovechar de la forma más conveniente maquillaje para cubrir el vitiligo y lograr el efecto que deseas.
Verifica que la piel esté limpia: para que el maquillaje penetre de la forma más efectiva, es necesario que antes de aplicarlo verifiques que no haya impurezas ni grasas sobre la superficie de la piel, así durará el efecto durante más tiempo y tendrá una apariencia mucho más natural.
Base o corrector: utiliza una base o un corrector que tengan el tono natural de tu piel. Debes ponerla de manera uniforme sobre las manchas blancas que se encuentran en la piel. De esta forma empezará a camuflarse la diferencia entre las tonalidades.
Sombras: elige un tono de sombra que sea un poco más oscuro que el color natural de tu piel y ponla sobre la base cuando se haya secado. Déjala fijar por unos minutos antes de continuar con el paso siguiente.
Polvo traslúcido: el paso siguiente es fijar el maquillaje que ya has aplicado usando un poco de polvo traslúcido. Usar este elemento te ayudará a que el maquillaje para cubrir el vitiligo dure mucho más tiempo y a que se mantenga fijo.
Usa un removedor de maquillaje: la última recomendación, es que evites tener el maquillaje puesto cuando no sea necesario. Esto puede ocasionar que se obstruyan los poros y que la piel empiece a irritarse, así que quita todo el maquillaje para cubrir el vitiligo usando un removedor convencional.
Además de los maquillajes normales para camuflar el vitíligo, también existen opciones como los tintes, que se usan para aplicar de manera tópica en la piel afectada, tal y como se realiza con los autobronceadores. El inconveniente con esta alternativa es que los parches se pueden hacer más notorios si no se aplica de la forma adecuada.
Estos tintes y maquillajes no representan una solución real para el problema, solamente logran disimularlo un poco, ya que no alteran o mejoran de ninguna forma la pigmentación natural de la piel.
Se trata solamente de una capa muy delgada sobre las manchas que puede ser removida con el más mínimo contacto del agua, y en el caso de los tintes, no suele durar más de una semana. Lo más conveniente cuando nos referimos al vitíligo, es buscar un método que actúe directamente sobre los melanocitos y estimule la repigmentación de las zonas afectadas.