¿Qué se necesita para ser un gentleman del siglo XXI?
Te han dicho desde niño que los caballeros abren las puertas a las señoras y les dejan pasar primero. Sabes perfectamente que hay que acomodar a tu pareja cuando vas a un restaurante (eso de acercarles las sillas les vuelve locas) y, por supuesto, muchas veces, muchas, pagas tú.
Estos códigos llevan estando vigentes prácticamente desde que el caballero bajó del árbol y optó por ponerse un traje con corbata y ser un gentleman: un hombre con una educación exquisita y un estilo reconocible a kilómetros. Quizás las damas no se desmayaban al verlo pero sí que se derretían al ver sus impecables modales. Cosa de conquistar no sólo a primera vista, sino también con algo de trabajo de fondo.
En 1975 Hubert de Givenchy, una de las agujas más prestigiosas que ha pasado por la faz de la tierra, decidió romper los códigos de la perfumería tradicional y presentó Givenchy Gentleman, el perfume de culto de la década de los 70 que mezclaba audacia y elegancia a partes iguales. Estos caballeros, deben siempre oler como dioses…
40 años después de que el hombre que convirtió a Audrey Hepburn en un icono, la casa vuelve a revolucionar al hombre con Gentlemen Only, una fragancia donde la elegancia es natural, fresca y masculina, en la que la seducción tiene el mismo espacio que la elegancia, porque se puede triunfar en la alcoba y ser el rey al día siguiente mientras te anudas la corbata al cuello. ¿Eres uno de ellos ?
