Buscando por la web, nos encontramos con esta pequeña anécdota, que sea cierta o no, tiene mucho sentido y claro está, buen humor:
«Una dama británica dijo una vez que si a su casa llegan visitas inesperadas ella agarra su sombrero y paraguas. Si la persona que vino es de su agrado ella le dirá «¡Ah que suerte que acabo de llegar y tu también!», pero si la persona que apareció sin avisar no es precisamente a quien ella quiere ver le dirá «¡qué lástima que deba irme!»».
Buena ¿no? ¿y a que viene todo esto? pues al hecho de hablar de aquellas personas ques e presentan en una casa si avisar, esa visitas que muchas veces pueden ser inoportunas.
Llegar de visita sin haber avisado previamente, demuestra una falta de educación muy grande, además de ser de muy mal gusto.
Cuando querramos hacer una visita, avisemos con atelación, y preguntemos si se puede dar dicha visita. Es mejor simpre tener tacto y quedar como personas conocedores de los buenos modales.
Por: María Beatriz «Be» Frías – Muñoz