El Gran Café Tortoni forma parte del selecto grupo conocido como Bares Notables de la Ciudad de Buenos Aires por su aporte al patrimonio histórico porteño (por su valor arquitectónico, por haber sido frecuentado por importantes personalidades y haber perdurado en el tiempo).
Se encuentra en Avenida de Mayo 825, en el barrio de Monserrat, Centro de Buenos Aires.
Este mítico lugar, considerado em más antiguo de la ciudad porteña , fué inaugurado hace más de 150 años, conservando su estilo y arquitectura original: sus mesas de madera de roble con mármol verde son preciosas, con elegantes sillones y sillas de roble y cuero, los lujosos techos de vitraux, y una amplia barra con una vieja caja registradora que es divina, tenindo al fondo mesas de billar y salones para jugar al dominó y a los dados.
Sus paredes magicas llenas de fotos, dibujos y cuadros y cada rincón del Tortoni tiene sus detalles.
La peña del Café Tortoni, famosa e inolvidable lugar de cultura, conoció la presencia de notables figuras como las de Juan de Dios Filiberto, González Tuñón, Luigi Pirandello, Carlos Gardel, entre otros. En ella se leyeron poemas, se cantó, se dieron conferencias y hasya se bailó el tango.
Actualmente, “La Bodega” es escenario para shows de Tango y de Jazz.
Es uno de los lugares más elegido por los viajeros y turistas que visitan la Ciudad de Buenos Aires, por eso, no es extraño que para tener mesa haya que esperar unos minutos haciendo una fila en la calle . Esto es común sobre todo los sábados.
Fantática la escultura en tamaño real de Carlos Gardel, Alfonsina Storni y Jorge Luis Borges. quienes parecen estar hablando en torno a una mesa: Gardel con un traje cruzado y Borges con su tradicional postura sentado con su bastón y Alfonsina con la vista al frente escuchando lo que dicen.
Tips importantes a la hora de visitarlo…
Trae tu cámara de fotos o video con mucho espacio para llevarte muchas imágenes de este lugar únicos.
Tómate tiempo para que puedas observr detenidamente las paredes que están llenas de arte.
t por favor ninca olvides pedír un exquisito chocolate cargado con churros.
Ten en cuenta que no es un lugar barato, t así que no olvides que es una atracción turística más que un simple café.
Procura visitalo durante la semana porque los fines de semana no te haces una idea de la fila de personas que te vas a encontrar para entrar, así que mucha paciencia.
Pyedes adquirir un recuerdo de su tienda de souveniers.
