El color blanco es ideal para para maximizar la luz de cualquier ambiente. Además siempre quedará bien cualquier espacio en blanco, pero ¿cómo hacer que no quede abirrido o impersonal?
Decorar en blanco no tiene porqué ser aburrido. El blanco combina con todo así que puedes usar distintos colores para romper la uniformidad del tono blanco.
El blanco es uno de los pocos colores que se puede usar de forma monocromática sin que resulte pesado.
Sin duda es un clásico no pasa de moda. ¿Cómo darle un toque personal? Combínalo en pequeñas cantidades con otros colores en tapicerías, cortinas, alfombras o cojines, pequeños detalles, asó como flores, las flores siempre vendrán bien, alegrarán las estancias y son chic.
Pero ¿qué colores usar? ¡el que desees! negro, gris, rojos, azules, rosa, cualquier color ganará más al lado de algo blanco. Es por esto que la decoración en blanco lo admite todo.
¿Quieres arriesgar? Dentro de un espacio con paredes blancas prueba con paredes en rayas, tapicerías de flores, cuadros o espejos con marcos de colores.
Y recuerda que cuando se habla de decoración en blanco, no queda solo en paredes, los muebles en este color dan un toque muy provenzal o boho chic, según sean utilizados. Así mismo los pisos en madera clara, son geniales en este tipo de decoración.