Ingredientes
600g de carne de ternera
400 ml de cerveza Guinness
1 cebolla, 2 zanahorias, 2 dientes de ajo y 100g de champiñones
1 lata de 400g de tomates enteros pelados
15 cebollitas blancas en vinagre (opcional)
1 pastilla de caldo de ternera
1 cucharadita de tomillo y otra de romero
1 huevo
2 paquetes de masa para pizza de la que vine extendida y enrollada, (Ojo! No utilizar hojaldre)
Harina, sal, pimienta, aceite y una pizca de mantequilla
Preparación
Lo primero que vas a hacer es dejar todos los ingredientes preparados. Troceas la carne en cubos mas bien pequeños, también la cebolla, los champiñones y los tomates (conservando el líquido de la lata). Picas o machacas el ajo, cortamos la zanahoria en medias rodajas y lavas las cebollitas para quitarles el exceso de vinagre. Por último, en medio vaso de agua caliente dilues la pastilla de caldo.
Salpimenta generosamente la carne y la enharina. En una sartén u olla antiadherente echas un gran chorro de aceite y pones la carne a fuego medio-alto 2-3 minutos o hasta que este hecha por fuera.
Echas la carne en una olla o cacerola grande, (si ya estabas usando una, la misma) bajas el fuego al punto medio y añades la cebolla picada, echando un poco más de aceite si ves que hace falta. Después de 2 minutos añades los champiñones, las cebollitas y la zanahoria junto con el ajo, el romero y el tomillo. Esperas un par de minutos más y echamos el tomate troceado, el líquido de dentro de la lata de tomates, la cerveza y la pastilla de caldo diluida en agua.
Mezclas bien y en cuando empiece a cocer bajas el fuego hasta casi el mínimo (3 de 10). Dejass cociendo 2 horas y remueves de vez en cuando. Al final tiene que haber reducido muchísimo, quedando una salsa marrón oscuro muy espesa (puedes s añadirle una cucharada de harina para que espese más).
Necesitaras varios moldes individuales o un molde grande aptos para el horno.
Prepara el horno a 200º.
Saca la masa para pizza del frigo y la extuendes. Marca la silueta del molde y con unas tijeras o un cuchillo cortas un trozo de unos 2cm más grande por cada lado. Extiendes un poco de mantequilla por el fondo y paredes de los recipientes y pon la masa dentro. Echa el relleno y tapa con otro círculo de masa un poco más pequeño. Unes los bordes y les das forma pellizcándolo.
Por último haces un agujerito en la parte de arriba para que escape la presión y lo pintas todo con huevo batido.
Metes en el horno hasta que la masa esté dorada y después desmoldass y sirves acompañado de guisantes, papas fritas y, por supuesto, una Guinness.