Conocida en Sevilla por los poetas como “la ciudad efímera”, la Feria de Abril transforma completamente la vida de la capital andaluza en una semana muy especial, nada más y nada menos que la Feria de Abril.
La gastronomía, la música, el baile y las ganas de divertirse transforman a Sevilla y la llenan de un ambiente muy especial.
Oficialmente la fiesta empieza el lunes a las doce de la noche con la “prueba del alumbrao”, el encendido de las miles de bombillas de colores del recinto ferial y la portada principal, que alcanza casi 50 metros de altura y es diferente cada año. En el interior ya están instaladas las casetas, el lugar donde se vive la feria.
Mientras dura la fiesta la gente viste los trajes típicos andaluces: las mujeres con vestido flamenco o de gitana, y los hombres con la indumentaria campera tradicional.
Por el día, la feria se llena con cientos de amazonas, jinetes y carruajes hermosamente adornados.
El domingo a medianoche, se despide la Feria de Abril, esperando el año siguiente.