Primogénita del Continente, Cumaná, está de fiesta, hoy el 27 de noviembre arribó a sus 500 años de fundación por misioneros franciscanos.
Aunque no hay una sola historia sobre la primera fundación de la ciudad , el relato de Cumaná comenzó 16 años antes de la llegada de Cristóbal Colón a América, así lo indica su cronista, Ramón Badaraco.
Cuenta que un navegante, Alonso Sánchez de Huelva, se perdió en altamar junto a 17 hombres “y atracó en lo que hoy es Cumaná y decidieron no regresar, para allí establecerse”.
Sin embargo, la historia oficial de la ciudad relata que el 27 de noviembre de 1515 precisa Badaraco- “el fraile Pedro de Córdoba, tras numerosas expediciones a la zona desde 1513, funda la primera misión”, para cristianizar a los cumanagotos.
Destruido el convento de los frailes en 1520 por una rebelión indígena encabezada por el cacique Maragüey, el español Gonzalo de Ocampo reconstruyó el poblado que un año más tarde llamó Nueva Toledo.
Una nueva rebelión lo destruyó y, en 1523, el capitán Jácome Castellón la refundó y en 1562 recibió el nombre de Nueva Córdoba, denominación que tuvo hasta 1569 cuando fué mudada de su lugar original y la volvió a fundar el Capitan Diego Hernández de Serpa, con el nombre del río Cumaná, siendo designada como ciudad 22 años después, .
Su nombre, Cumaná, viene del nombre dado por los aborígenes al río Manzanares.
Es la “Primogénita del Continente” por ser la primera ciudad fundada en tierra firme americana por los españoles. Conocida como Puerto de las Perlas por la abundancia perlera que atrajo a los españoles.
Los escritores cumaneses Diego Córdoba y Andrés Eloy Blanco la llamaron “Ciudad Marinera” por el mar que la baña en el Golfo de Cariaco.
También le dicen la Ciudad Mariscala por ser la ciudad natal del Mariscal Antonio José de Sucre.