El origen de esta hacienda data del año 1590. Los chaguaramos bordeandola, es un verdadero y extraordinario lugar del oeste de Caracas.
Con su arco de color canela con la inscripción “1590 Hacienda La Vega”, es algo verdaderamente paradisíaco.
Ha pasado por una larga sucesión de familias que hicieron vida dentro del complejo arquitectónico que hoy se conforma como monumento histórico nacional.
Franqueada por cinco arcos en cuyos frontones se leen exhortaciones que advierten las premisas de la vida campesina: “Siembra y cosecharás”, “Sin abono no hay cosecha”, “No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”, se pone en evidencia los orígenes de este fascinante lugar.
Se encuentra situada en el corazón de la irbanización El Paraíso, y en ella aún encontramos lo que fue aquella época: el antiguo torreón del trapiche y, en el fondo, la señorial casona de amplios corredores.
La casona y sus inmediaciones, que alguna vez fueron recinto para la vida doméstica, ahora sirven como un lugar de encuentros para el quehacer cultural de la ciudad.
Actividades de diversas índoles han tendido lugar en sus amplios jardines y modernos salones. Conciertos de la Camerata Barroca de Caracas, exhibiciones de arte colonial y encuentros seminariales han sido algunas de las actividades que han dado marco a este (en ocasiones) desconocido espacio.